Julio Ricardo
Blanchet Cruz
·
Las rebanadas del pastel…
Otra vez, Trump desmiente a la doctora Sheinbaum, quien declaró
que, en su plática con el norteamericano, se había acordado que ellos verían lo
del tráfico de armas; y que nosotros veríamos el asunto del fentanilo y el de
los migrantes…
Pues nada. De los migrantes, mejor
ni comentamos. En la frontera se vive un
caos. Kilómetros y kilómetros de camiones,
que en rigurosa fila india van llegando a la aduana para cruzar al otro lado; y
las revisiones van en serio 10 000 soldados están abocados a ello…
Pero si no se está en el lugar, es difícil comprender la magnitud del
problema, cuando en esas filas de kilómetros, dependiendo de la frontera, tardan
en pasar hasta 20 horas…
Con relación a las armas, el presidente Trump echará abajo el
decreto firmado por Biden, referente a las restricciones que aprobó para
poseerlas. Y toda vez que sus versiones
son diametralmente opuestas, lleva forzosamente a pensar, que uno de los dos
está mintiendo…
Y decir que eso pueda tomarse como que se encargó del asunto; pues como
que no; porque ahora, sin restricciones, cualquiera podrá comprarlas. Lo que suena como una invitación a que los
ciudadanos se armen…
Cuando de por sí, nunca les ha faltado un loco que se ponga a disparar a
cualquiera…
Pero lo inédito e histórico será, sin duda, la reunión que tendrán Putin
y Trump en Arabia Saudita para hablar de la paz en Ucrania. Por cierto, que el príncipe heredero Mohamed
bin Salmán, es buen amigo de Putin…
Pero lo primero que deberán hacer al reunirse, será pactar de inmediato
el cese al fuego. No pueden sentarse a
dialogar sobre la paz, mientras otros se están matando…
De imaginar la clase de seguridad que debe de mover la reunión para velar
por dos de los tres hombres más poderosos del mundo -Xi Jinping-…
Seguramente se pactará la paz; y ésta deberá ser bajo las condiciones de
Rusia. Primero, porque en el fondo será
un duelo personal; y ni qué decir sobre quién es el más inteligente…
Segundo, porque, bien o mal, Rusia está peleando su territorio; del que
no va a ceder ni un ápice, pues sus habitantes no lo permitirían. Y sobre el papel, Ucrania estaría quitándole territorio
a la Federación Rusa. Y eso sería una
derrota inaceptable, no un acuerdo de paz…
Y tercero, porque no se negocia estando en la lona, no se negocia con el
derrotado. Y menos ahora que Putin no
puede creer en acuerdos que de inmediato no se lleven a cabo…
En una entrevista, el propio Putin dijo que ya había tenido
bastante experiencia por haber confiando en los Acuerdos de Minsk, que les
sirvieron para armar hasta los dientes a Zelensky…
Lo que mueve a Trump a intervenir en la negociación, es el negocio
y recuperar el dineral que ha invertido en el conflicto. Pero no es el único que quiere una rebanada
del pastel, El Reino Unido y Francia también quieren parte de lo que sería el
botín de guerra…
El caso es que la paz, que es un derecho, ahora se negocia. Y en esos negocios siempre hay un ganador y
un perdedor
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario