La solución es personal; juntos no tenemos remedio…
Con un Congreso integrado en su mayoría por individuos oportunistas que impunemente violan el Estado de Derecho; con un Ejecutivo fantasioso y autoritario que quiere acabar con la corrupción sin aplicar la Ley y con libritos que son repartidos por religiosos, lo que viola flagrantemente la Constitución, ya que se supone que somos una Nación Laica… Con un Poder Judicial que intenta reestructurarse para salir de la podredumbre heredada; y con una oposición que en sus programadas manifestaciones no logra reunir el suficiente quórum ni para un baile de graduación… Aunque los pocos que acudieron al llamado de varias organizaciones civiles que seguramente no han salido beneficiadas con las nuevas medidas adoptadas, llevaban pancartas que decían… “Los mexicanos no queremos una nueva República, ni tampoco una nueva Constitución”. Cuando hasta el día de hoy nunca ha habido una verdadera división de Poderes, que es lo que signa a las Repúblicas; aunque en grandes letras en el Senado así se establezca. Y sin soslayar que TODOS los que han gobernado se han pasado nuestra Carta Magna por el Arco del Triunfo… Pero los pocos asistentes, eso sí, muy entusiasmados, coreaban un “Fue-ra López”, “Fue-ra López”, como si alguien verdaderamente les fuera a hacer caso. Cuando nadie se les sumó en la marcha, que inició en el Ángel de la Independencia ¿? -cuál independencia- para terminar en el monumento a la Revolución… Revolución cuyos principios de “Sufragio Efectivo-No Reelección” han sido oprobiosamente violados por quienes se dicen herederos del movimiento armado que costó tantísimas vidas… Acotando que hubo ciudades en las que, a la hora que fueron citados los rabiosos opositores, no se presentaron a las marchas ni quienes la convocaron, como sucedió en el Norte del territorio… Dejando en evidencia a todos aquellos agoreros que han despotricado en contra de la 4T y augurado su rotundo fracaso; a tal grado que ya veían caer al Presidente y ponían en su lugar a otro… Como también fue el caso del Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, para quien hasta un Juicio Político ya pedían en su contra y ya barajaban los hombres de quienes podrían sustituirlo. Todos a conveniencia no de la Patria, sino de sus propios intereses… Y no es que se defienda a ninguno de los dos gobernantes; y de hecho, a nadie de los que integran la política mexicana; pues el que más el que menos, tienen cola que le pisen al haber pertenecido de una u otra manera al estercolero que ha conducido los designios de la Nación en los últimos años, por no decir que desde siempre… Pero ¿cómo podemos pedir gobernantes honestos, si todos han salido de la sociedad que conformamos y que es corrupta y transa hasta la médula?... Para tener gobernantes honestos y patriotas, gente de palabra, primero tenemos que cambiar los ciudadanos; y eso, por el momento, es demasiado pedir, pues somos una sociedad enferma. Literalmente enferma… Luego entonces, consecuentemente quienes nos gobiernan son irredentos e insaciables enfermos de poder y de dinero; no puede ser de otra manera. Sin embargo lo malo del caso es que ya no tenemos tiempo para curarnos… Principalmente porque los enfermos quieren que los curen sin poner nada de su parte para recobrar la salud. Y el problema no se solucionará con muchas medicinas, como pretende hacerlo el Presidente López Obrador destinando para ello millonadas de dinero… Mientras no se modifiquen los hábitos alimenticios y se dejen de comer porquerías, nada podrá mejorar. Las estadísticas son pavorosas. Nos alarmamos por la cantidad de muertos que a diario suceden por causa de la desatada violencia… Pero los que mueren por esa causa, son muchos menos si los comparamos con los que fallecen a causa de enfermedades previsibles y evitables, como el cáncer, la diabetes y los problemas cardio-circulatorios, que diariamente cobran, según datos oficiales, poco más de 400 defunciones diarias… Sin embargo se destinan muchos más recursos para combatir a la delincuencia organizada y desorganizada, que para la salud de la población. Resultado: ni se logran disminuir los crímenes, ni tampoco los ocasionados por las enfermedades… ¡Total! que nunca saldremos adelante mientras queramos que los demás cambien, sin que nosotros hagamos lo propio y empecemos por cambiar nosotros mismos. La solución es personal, juntos no tenemos remedio… Razón por la cual se ve en extremo difícil que salgamos del tobogán en el que ya hemos caído y por el que nos deslizamos vertiginosamente, junto con gran parte de la humanidad, hacia un desastre impredecible, pero definitivamente peor del que ya vivimos. Ya de salida… Les recuerdo que Airbit Club, con Mauricio Larios e Itzel Gutiérrez al frente, es una empresa que anda defraudando con las criptomonedas. Denúncielos. Son delincuentes. Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.