Opiniones
y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
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De los
hijos no deseados…
Las grandes civilizaciones, los
grandes imperios han caído al contaminarse, al adoptar otras costumbres de
pueblos a los que previamente habían conquistado; o de alguna manera se habían
mezclado con ellos…
Los migrantes llegaban con una
cultura diferente y se fusionaban en un sincretismo que la mayor de las veces
adoptaba lo peor de cada uno de ellos.
Rara vez los mestizajes dan buenos resultados; y México somos un buen
ejemplo de ello…
El aprobar el matrimonio entre
personas del mismo sexo, es introducir un mundo en otro mundo, además
mayoritario. Los homosexuales tienen su
mundo y su cultura, su forma de vivir…
Pero esa forma de vivir no es
aceptada por la mayoría; y una lamentable prueba del rechazo es que son
repudiados y frecuentemente agredidos.
Querer tapar el Sol con un dedo es no aceptar que todavía se considera
una ofensa que a alguien le digan “maricón”…
Un pequeño abandonado por su
joven madre y dejado al cuidado de su abuela, carente del cariño y la
protección que por naturaleza requieren la mayoría de los animales; viendo que
su abuela acariciaba a uno de sus hijos, también se acercó y le dijo: “¿Verdad
que a mí también me quieres?”…
A lo que la abuela le contestó: “¡Ay
hijo! si ni tu madre te quiso, ¿quién quieres que te quiera?”…
Y ese es el problema. Los homosexuales y demás retahíla de
variantes, son hijos no deseados.
Nadie puede desear tener un hijo
con esas características. Ni los mismos
homosexuales quieren que sus hijos sean como ellos…
Pueden ser aceptados -y
principalmente por sus madres; para los padres seguro que no es ningún orgullo
que puedan presumir con sus cuates que su hijo les salió con que le gustan los
hombres. Y no reconocerlo es hipocresía…
Pero ponerle al escudo de la UNAM
un fondo con los colores gay; es claro ejemplo de la decadencia de esa otrora
Casa de Estudios…
Si a los gays no les gusta
nuestra forma de vida heterosexual y de valores éticos; pues a la mayoría no
nos gusta su antinatural forma de vivir.
Como ya están casados ante la Ley, entonces una pareja de hombres puede
presentarse en el festejo del día de la madre en el colegio de un infortunado hijo
adoptado…
¿Encuestas? Hagan bien las preguntas a los niños: “¿Te
gustaría que tu mamá fuera un hombre? o lo contrario ¿Te
gustaría tener a una mujer como papá?
Según la OMD -que evidentemente
ha fracasado en su encomienda, pues la humanidad está enferma- la
homosexualidad no es una enfermedad de la mente; pero no se han puesto a
considerar que la sexualidad, primeramente es un instinto. Lo que está
trastocado en los homosexuales, es el instinto…
El pensar que esos dos mundos
pueden convivir, es tanto como aceptar que Yalitza
Aparicio, la joven mexicana que ganó premios con la película Roma, se vaya
a vivir al Palacio de Buckingham con la realeza y quiera poner un anafre y
hacer gordas. O que la Reina Isabel
quiera ir a Oaxaca vistiendo como viste y comiendo como come…
Eso los hace vivir en mundos
diferentes. Y es un error que
históricamente se ha pagado el aceptar la homosexualidad como normal. Se está en total desacuerdo en que los
ofendan o los agredan; pero iguales; no, tampoco.
Y nos vemos mañana, si el Sol me
presta vida.
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