Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

DiarioLibertad@gmail.com

 

·                   Septiembre 11…

Las 24 horas del día, los 365 días del año, hay aviones de combate artillados hasta los dientes y helicópteros de ataque listos para despegar en cualquier parte de todo el territorio continental de los EE.UU. y en las bases que tienen por medio mundo…

Pero te cuentan versiones de que no nada más fueron las Torres Gemelas; que luego se cayó otro edificio -el tiempo que tardó en colapsar varía según las versiones- pero ya sin avión de por medio.  Aparte del otro que fue a dar contra el Pentágono…

Todos hemos escuchado o leído con frecuencia noticias, de que X avión violó el espacio aéreo de X nación; por lo que fue casi de inmediato interceptado por cazas que lo conminaron a cambiar de ruta…

¿Luego entonces, cómo voy a creer que no se dieron cuenta que las aeronaves comerciales cambiaban su ruta, cuando los controladores aéreos son quienes las trazan? Y debieron haberlo advertido...

El caso nos lleva a pensar que, o los atentados demostraron la vulnerabilidad del sistema de defensa; como cuando en 1987 un joven alemán de 19 años de nombre Mathias Rust, aterrizó en un pequeño mono-motor en la Plaza Roja, burlando todos los sistemas defensivos de la entonces URSS.  Lo que le costó estar preso un año…

O la versión de que Las Torres Gemelas fue un auto-atentado para justificar el asesinato de Osama Bin Laden -su ex socio, que debe de haber sabido demasiado- la invasión a Afganistán y el muy lucrativo negocio de la heroína que el mismo gobierno de los EE.UU. compra para sus soldados -y lo que se vaya ofreciendo-…  

Pero también les ha servido para tener apanicados a sus ciudadanos, que ven como terrorista a cualquiera que no sea güero.  Las agresiones hacia quienes se ven diferentes se suceden a cada rato…

Por lo que los hechos conmemorativos de lo sucedido hace 20 años, más parecen un recordatorio del pánico que se vivió y que se puede volver a vivir; pues finalmente el pánico es buen amigo de los gobiernos, cualquiera que sea su ideología.  Pero la verdad del Septiembre 11sigue en el aire.

Cambiando de tema…

Lo que sí parece muy bien, toda vez que es preferible que un delincuente ande en la calle a que un inocente esté preso; es el decreto publicado por el Gobierno de la CDMX de que liberará a las personas que estén privadas de su libertad y que aún no tengan sentencia; las que hayan sido torturadas, tengan enfermedades graves o sean adultos mayores.

Ya de salida…

La creencia religiosa de que el suicidio es un pecado; y que, por consiguiente, quien lo comete, obviamente no tuvo la oportunidad de arrepentirse, luego entonces las puertas del cielo le son cerradas.  Y para toda la eternidad estará privado de gozar de la presencia de Dios.  Así dicen…

Lo que en términos paganos puede ser interpretado como quien va al partido de fútbol y no ve el espectáculo del medio tiempo.  Bueno; más o menos así.  Pero en el fondo nadie, absolutamente nadie sabe lo que hay después de la muerte.  Lo que le cuenten; son cuentos…

Pero nos llevan a recordar al monje agustino Martín Lutero (1483 - 1546) “En nuestra triste condición, el único consuelo que tenemos es la esperanza de otra vida; aquí abajo todo es incomprensible”… 

Referente al suicidio, que ya es la segunda causa de muerte entre las personas de entre 25 y 34 años de edad; aunque se dan casos cada vez más frecuentes de menores y de adultos que se suicidan; y mientras más años tiene la persona, mayores son las probabilidades de atentar contra la vida…

Digno de mencionar, es que de cada 4 personas que se suicidan, 3 son hombres; y aunque las causas van desde cobardía hasta valor inaudito; decía Friedrich Nietzsche (1844 – 1900) “Aunque se dice que ha habido hombres sabios que se han matado, en términos generales no es un exceso de razón lo que lleva a las personas a quitarse la vida”…

No obstante, el sentido común dice que si vienes a esta vida a algo -que no sea a suicidarte- el quitarte la vida es darte por vencido, es decir, haber fracasado a lo que viniste.

Por último…  

Por andar con malas amistades, como el multimillonario Jeffrey Epstein, quien se suicidó estando en prisión acusado de pederasta; el que también está en problemas es el príncipe Andrés, hijo de la reina de Inglaterra y hermano de Carlos, quien recibió un citatorio judicial en el que una dama de nombre Virgina Giuffre lo demanda por haberla violado hace 20 años cuando ella era menor de edad…

Por supuesto que el príncipe, que ostenta el título de Duque de York -wow- lo negó, y negó conocer a la mujer que lo demanda; sin embargo, aunque se ignora cómo es que Virginia podrá probarlo, se ha publicado, como parte del caso, una comprometedora fotografía en la que se encuentran los dos juntos. Se supone que con dinero se arreglará el asunto.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.