Opiniones y Comentarios
Julio
Ricardo Blanchet Cruz
* ¿Y luego que hago?...
Siguiendo el manual, al Presidente López Obrador ahora le toca hacerse la víctima. Pues dadas las adversas circunstancias que se
le han presentado al descubrirse sus tranzas y Pío componendas, que son todo lo
contrario de lo que predica de honradez y rectitud...
Han hecho que internacionalmente se encuentre en el ojo
del huracán. Y no muy bien parado, que
digamos; pues es calificado como de lo peorcito. Aunque él desconoce los datos,
diciendo que es “politiquería”; que es precisamente lo que él hace...
Y como si estuviera en esas albercas de hule espuma para
que los niños jueguen; hace lo propio y se avienta con los brazos abiertos en cruz
que, como ya se sabe, es una de las técnicas que utilizan los políticos para
parecerse al hijo de María y el guapérrimo,
extraterrestre; dirían las chicas...
Porque siendo su madre descendiente directa de Noé, su abuelo; aquel del Diluvio Universal. El cuento que se fusilaron del Poema de Gilgamesh, allá en la
Mesopotamia -copiado como si fuera tesis de Derecho en la UNAM- e hija de Sam;
o sea...
Que siendo semita, su hijo le saliera de ojo azul y pelo
castaño, fue una bendición; aunque ciertamente es a todas luces clasista. Pero como siempre hay que escuchar todas las
teorías, hay quienes opinan que el papá no era extraterrestre, sino, por
aquello de los ojos azules, siberiano; como los Husky...
En esos tiempos haber llegado de Siberia, era como haber
llegado de otro mundo. Como cuando los
ibéricos llegaron a América, o los vikingos a Canadá. ¡Otros mundos! No se sabe
de ningún siberiano haya ido a vacacionar por el Mare nostrum. Pero
Imaginarse en aquella Palestina -que fue el nombre que le
pusieron los romanos a Judea- un cuate que llegó de un mundo sin una palmera,
ni dátiles, ni camellos. Debía de ser
extraterrestre...
Pero regresemos con el Presidente López Obrador, que ahora se azota para que lo levanten; y nos salen
con que hay ¡¡una industria del derrocamiento!! y que es internacional. Se acaba de enterar que es la CIA y dicen que
hasta hizo ya se hizo una película...
Pero bueno. Si ya hicieron un himno al AIFA, nada extraña
que por ahí el cineasta lame-suelas da todas las explicaciones de cómo actúa
esta industria que ha derrocado a mandatarios por todo el mundo. Eureka,
eureka...
El señor Presidente dice que es su popularidad; por envidia
es que lo atacan. Y aunque de alguna
manera lo es, la lástima es algo que ninguna persona sana quiere para sí...
Al contrario de los enfermos, que es precisamente el
sentimiento que quieren despertar en los demás.
Pobrecito, está malito, suelen decir las personas que caen en sus manipuladores
juegos. Y es lo que hace el Presidente
con sus seguidores, a los que califica como ignorantes...
En lo personal, sabiendo que todo se regresa, no le deseo
mal. En no pocas ocasiones he citado las
palabras de Pitágoras (569 – 475) “El bien y el mal, no existen; solo existe la
salud y la enfermedad”...
Demoledora sentencia que echa por tierra a todas las
religiones; que precisamente se basan en eso; en el dios bueno y el dios malo. Y lo mejor del caso, es que de eso viven, de
engañar a los demás. ¡Que feo!...
Pero regresemos con los enfermos, con los que están
mal. Por eso, en remembranza de su
pensamiento, cuando alguien se enferma, dicen que se puso mal, que está malito;
como evidentemente lo está el señor Presidente...
Y como los enfermos piensan como enfermos, porque no pueden
pensar como sanos; pues ahí están los resultados y las consecuencias que
estamos pagando. Solo hay que ver cómo
tiene a México de dividido y crispado...
Mi deseo al señor Presidente es que sane y se recupere;
pero mientras eso sucede, a México se lo está cargando el demonio -Don Sata pa
los cuates-. Aunque nadie es malo. México no es malo. México está enfermo...
Los hospitales y clínicas, a pesar del pésimo servicio
que proporcionan, tipo anti-Dinamarca, están llenos de enfermos. Hacen hasta cola para que los atiendan. México está enfermo. Sus ciudadanos están enfermos y,
consecuentemente, piensan como enfermos...
Una persona con diabetes no piensa igual que una persona
sana, por poner un ejemplo y diabéticos sobran.
Y los gordos, por ahí andan, tampoco piensan igual que los sanos...
Sólo así, estando enfermos, se entiende que permitamos
que un individuo nos divida ¡hasta en las propias familias! y sin que hagamos
algo. Cuando por menos, en otras Naciones ya están protestando. Y nosotros, a querer o no, seguiremos por el mismo
camino...
Porque ya es tarde, el problema de las pensiones se
habría evitado, si las juventudes se encaminaran, no al trabajo o al estudio;
sino a hacer lo que a cada cual le gusta.
Que, sin duda, es la única forma de ser feliz...
Nadie puede ser feliz haciendo lo que no le gusta. Lo he comentado con mis tres amables lectores.
en no pocas ocasiones. Por eso necesitan
descansar los fines de semana y desde luego, de las más que justas vacaciones...
Pero quien hace lo que le gusta, lo hace todo el tiempo, diríase
que todo el tiempo anda de vacaciones; y, consecuentemente, lo que hace, acaba haciéndolo
muy bien. Y quien hace las cosas bien, lo que sea, acaba triunfando y viviendo bien
de esa manera...
Acabo de saber de un socio, con el que hace como 50 años pusimos
una fábrica de muebles. Ya anda por los 90 años y sigue haciendo lo mismo. Desde aquí, querido Pepe, te mando un fuerte abrazo.
¿Jubilarse? ¿Y luego que hago?
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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