Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

DiarioLibertad@gmail.con.mx

·       ¡Lo de siempre!...

Parece mentira que a estas alturas del Siglo XXI no se acepte que la mujer es rival de la mujer.  La amistad eterna entre dos mujeres, termina cuando la mejor amiga le da bajilla con el galán, o le pone los cuernos con su marido...

Pero ¿de dónde viene eso de “ponerle los cuernos a la pareja”? no al hecho, sino a la expresión.  Pues parece que en la $agrada Inquisición, si un hombre cometía el muy socorrido pecado del adulterio, lo hacían caminar por las calles de la ciudad, con unos cuernos en la cabeza, para que todo el mundo se enterara de su infidelidad...

A ciencia cierta se desconoce un claro origen; pero dicen que semejante método de castigo dejó de aplicarse, porque al públicamente señalarlo como garañón, más bien le hacían como propaganda.  Hubo quienes salían a la calle y se ponían los cuernos. Hoy el término se aplica indistintamente a los hombres y a las mujeres...  

Sin entender, que el hecho a imagen y semejanza de El Creador, es infiel por naturaleza, es decir, es inherente a su condición de especie animal.  Hay animales que son monógamos, sólo tienen una sola pareja en toda su vida, como los gibones, los pingüinos, los castores, zorros, nutrias, algunos murciélagos, etc.

Y por supuesto los lobos.  Verdaderos y encomiables ejemplos de civilidad y civismo, social y familiar, que ponen en duda el comportamiento humano como seres superiores... 

Tal vez la monogamia pueda no ser muy divertida -aunque el Kama Sutra dice todo lo contrario- pero refleja que quien así se conduce, no es estúpido.  No hay nada más imbécil que complicarse la vida...

Si no puede con una, menos va a poder con dos, o más.  En veces se piensa que un harem sería lo ideal; pero el chismerío sería tremendo y como acaban involucrándose todos, termina mal...

Y si a los hombres los ciega la hormona, los vuelve bestias -solo hay que ver a un caballo cuando hay alguna yegua en celo-; A las mujeres las ciega la competencia.  A pesar de que el robarle el marido a otra las hace temibles...

Entre los hombres es diferente.  Robarle la mujer a otro, es peligroso.  Pero es el pan nuestro de cada día; y a todos los niveles...

Ahí está el caso de Alberto Fernández, el expresidente de Argentina, que siendo el Primer Mandatario de la Nación, le tundía a Fabiola Yáñez su hoy ex esposa, aun cuando estaba embarazada...

Si luego se preguntan los hermanos argentinos por qué están ahora tan mal, siendo una nación tan rica; pues por los gobernantes que han tenido.  Y la cobardía de Alberto Fernández es otro ejemplo de que el poder lo vuelve locos...

Porque encima de todo, aunque la verdad se sabrá cuando por mandato judicial se den a conocer las llamadas y mensajes de la pareja; lo que hasta ahora se sabe, es que Sofía Pacchi su amiga y ex asesora -de no malos bigotes; hay que reconocerlo- a quien la entonces Primera Dama le contaba todas sus confidencias ¡¡le ponía los cuernos con su marido!!...

Y como todas las parejas que son “cachadas” en la movida y justamente les reclaman su infiel proceder, responden con violencia.  Y ante la pregunta de quiénes son más promiscuos, los hombres o las mujeres, sin duda que las mujeres tienen muchas más oportunidades que los hombres...

Los hombres salen a la calle a ver a quién se ligan; y si no traen dinero, se regresan con las mismas.  No así las mujeres, que salen a la calle y si quieren, se salen con la suya.  Todo esto de oídas ¡Claro! Es lo que dicen los expertos.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.