Opiniones
y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
jrblanchetcruz@hotmail.com
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Espionaje comprobado…
Apoyando el papa
Francisco las afirmaciones que he hecho referentes a que el Vaticano tiene
el mejor servicio de inteligencia, vulgarmente llamada espionaje. Del que por cierto todos se quejan, aunque
todos de alguna manera lo practican…
Declaró que la
$anta $ede analiza la posibilidad de aplicar la máxima de las penas; pero no a
los pederastas -no vayan a creer tanta suerte- a los que tienen en jaulas de
oro cuando son llamados a cuentas por sus perversidades…
No. La máxima pena
a la que se refieren los entes vaticanos, es a la terrible EXCOMUNIÓN. O sea, la condena al fuego del Infierno sin
posibilidades de amparo o revisión de expediente. Que viene siendo más o menos lo mismo que el
petate del muerto con el que antes asustaban a la gente. Pero en fin…
Nada, no hay
posibilidad de salvarse, a menos que den una buena mochada para apoyo a sus
niños pobres. Pero si no hay dinero, lo
mandan a convivir por toda la eternidad con Don Sata…
Y padecer las más
espantosas torturas, que harán que caer en manos de las honorables autoridades policíacas
en México, cuando están necesitadas de encontrar culpables, sea un juego de
niños…
Porque hasta ahí, hasta
El Averno, no llegan las recomendaciones de la CNDH. Que a fuerza de ser sinceros, si llegaran
tampoco les harían mucho caso…
Pero regresemos
con el tema que es la excomunión que los curas piensan aplicarles a los
políticos deshonestos -uuuyy, que mello- según se informó el pasado domingo a
través del panfleto de estulticias que sale cada ocho días, al que llaman Desde la Fe…
Y todo porque dice
estar preocupado por la situación político electoral rumbo a las elecciones del
18. Información que llegó a través de sutil espionaje, es
decir, a través de los confesionarios…
Donde se enteraron que los ciudadanos
desconfían de los Partidos Políticos, hoy “en
irrefrenable caída y descomposición que, al final, se niegan a responder de las
atrocidades cometidas por sus gobernadores que al amparo de sus Partidos
devastaron las economías de los Estados del País”…
“Por lo que la
sociedad pide que los Partidos políticos respondan como terceros responsables
del desfalco de las arcas por parte de estos delincuentes que ahora están bajo
arresto”…
Pasando por alto que su inventado dios dijo: “el que esté libre de pecado que lance la
primera piedra”. Y como que para
hablar de atrocidades cometidas y de corrupción, los curas no son los más
indicados…
Yo estaría de acuerdo con ellos si sus amenazas
de castigos eternos a los políticos corruptos surtieran efecto; pero
sinceramente dudo mucho que el excomulgarlos a todos vaya a frenar la
corrupción…
Además, lo mismo y todos se arreglan mediante
una buena lana; como inteligentemente lo hizo el señor Peña Nieto para que le anularan el matrimonio religiosos a su ahora
esposa…
¿Cómo es posible? pregunto yo, que se pueda
juzgar a alguien -y menos ellos, tan creyentes de sus vaciladas- cuando según
ellos mismos “no se mueve la hoja de un
árbol sin su $agrada voluntad”…
Lo que quiere decir, siguiendo esa línea de
pensamiento, que la gente nace cuando Dios quiere, no se mueve la hoja del
árbol si él no lo dispone. Se muere
también cuando Dios quiere; y ¡todavía se atreve a juzgarlos! Oigan no.
Ese dios está peor que Trump de
orate…
Pero afortunadamente nada de eso es
cierto. Todos tenemos libre albedrío y
somos los únicos responsable de lo que nos sucede. El Creador, el UNO -todo cuanto existe es la
repetición del UNO- además nos pone en el lugar idóneo -en tiempo y forma,
dirían los puristas- para que logremos la meta que vinimos a realizar en esta
vida…
Todos venimos para algo específico; el chiste
no es solo encontrarlo, sino tener el valor de seguirlo. De perseguir los sueños. En el entendido de que nadie puede ser feliz
haciendo lo que no le gusta. Ya que es tanto
como si un artista de teatro desempeñara un papel para el que no fue contratado
y consecuentemente no lo conoce. Y lo peor es que así está la inmensa mayoría.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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