Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

jrblanchetcruz@hotmail.com

·             De la idolatría…

Lo primero que hay que entender, es que nada tienen que ver los dioses en los conflictos y las matazones que en sus nombres se llevan a cabo en el mundo entero; ya que el origen de todo es el dinero…

Pero los que se dicen representantes de las divinidades, disfrazan sus desmedidas ambiciones de riqueza y de poder, haciéndole creer a la gente que matan y dan la vida en defensa de sus patéticas, fantasiosas e improbables enunciaciones…

Como lo prueba lo sucedido en Teherán, la capital de la Antigua Persia, ya que si bien es cierto que los persas -de raza aria- no son árabes -de raza semita- ambos comparten las mismas creencias en Alá, su profeta Mahoma y su libro sagrado, el Corán; y sin embargo se la han pasado peleando desde siempre…

La lana es la lana; y desde la muerte del Profeta, allá en Medina en el 632, dos grupos se proclamaron herederos del negocio -más o menos como sucede en Coahuila y en el Estado de México- y desde entonces se la viven peleando entre ellos…

Lo que ha sido aprovechado por otros vivales, que queriendo una rebanada del pastel, formaron sectas con diferentes nombres.  Prácticamente hacen y dicen lo mismo, pero a la hora de la recolección de los dineros, también reciben lo suyo.  ¡Cómo de que no!...

De igual manera que el judaísmo se escindió con el cristianismo y este último a su vez se ha subdividido miles de veces; a tal grado que solo en México, hay más de 100,000 religiones registradas ante la Secretaría de Gobernación…

A no dudar, en todo México hay más igle$ias que fosas clandestinas o casas de empeño; lo que ya es decir bastante para un país tan pobre en dineros y rico en matazones.  Pero en fin…

Lo mejor de todo es que cada una de esas religiones, a través de sus representantes, que a fin de cuentas han demostrado hasta el cansancio que no son nada de lo que predican, dicen poseer La Verdad…

Cuando “La Verdad es lo que es común a todos los hombres, de todos los tiempos.  Lo demás, son solo puntos de vista”.  Según solía decir Pitágoras (572? – 497?) 

El caso es que todo indica que los recientes atentados en la capital de Irán, ya reivindicados por los yihadistas -los soldados de dios que luchan por la yihad islámica, o sea, por la guerra $anta- tienen todo el sello de haber sido preparados desde Arabia Saudita tras la visita y a instancias del orate yanqui…

Que siguiendo instrucciones a lo que declaró que no andaría invadiendo naciones, fue a atizarle al avispero en contra de Qatar -o Catar- donde EEUU tiene asentada la base más importante de toda la Península Arábiga; y por eso, sacando ventajas, se va a prestar para que regrese la armonía entre las petromonarquías…

Mismas conformadas en su gran mayoría por los sunitas, representados por varios individuos llamados imánes, son seguidores de la Sunna, un libro que contiene el pensamiento de Mahoma.  Los chiítas, la minoría, obedecen una sola cabeza, y son los seguidores de Alí, primo-hermano del Profeta, casado con Fátima, la hija de Mahoma…

En Irán la mayoría son chiítas, pero conviven pacíficamente con los sunníes; aunque en términos generales, durante Siglos ambos bandos se han matado entre ellos por el inmenso poder que les da el tener tantos idólatras que los siguen…

Solo en tiempos de Saddam Hussein (1937 - 2006) pudieron convivir en paz.  Y desde luego bajo la autoridad del inmenso Saladino (1171 - 1193) sunita de origen kurdo, que fue Sultán de Egipto y Siria, incluyendo en sus dominios Palestina, Mesopotamia, Yemen, Hiyaz y Libia, quien logró unir a los irreconciliables chiítas y sunníes para derrocar a Los Cruzados y reconquistar Jerusalén…

Desde luego que la alianza entre ambos bandos tenía su base en los mismos principios; no como la alianza del PAN y el PRD que solo están interesados en los beneficios económicos que puedan tener…

Pero en términos generales, lo que todos persiguen es el dinero que les da el poder; pues hasta Las cruzadas, que fueron nueve, no fueron para reconquistar las tierras $antas, sino para recuperar el dominio de las rutas que iban a Oriente.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.