Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

diariolibertad@gmail.com

·                       Del “Síndrome de Layito”…

 

Después del derechazo en el puritito botón de la honestidad, que lo dejó totalmente fuera de combate; y a no ser porque sonó la campana lo hubieran decretado KO.  Pero increíblemente recuperado regresó a la lucha -bueno, no tanto, al hablar del tema balbucea y dice incoherencias-…

 

Pero recién sonó la campana le volvieron a atizar dos golpes que a cualquiera hubieran derribado fuera del ring.  Pero no a él, que tiene una coraza más dura que el acero -se puso coraza, no cachaza; que conste-… 

 

El primero fue que su sospechosamente consentido, cuyo desempeño como Gobernador de Chiapas dejó mucho que desear, fue inmiscuido en problemas de tipo electoral que de hecho son un delito; aunque el ex gobernador, lógicamente lo negó…

 

Y además, en un video que circula como si fuera virus, su propio abuelo paterno le dice al Presidente que traicionó a su Pueblo.  Y más.  Que se avergüenza de él y le dice, repito, el abuelo le dice a su nieto, que es un hijo de puta…

 

Lo que me hizo deducir que es el abuelo paterno, si fuera el materno no se lo diría.  Y como nada se ha escuchado de parte de los involucrados, la grabación se da por auténtica, no trucada… 

 

El segundo golpazo fue otro video -no nuevo- en el que otro hermano, Arturo, se refiere a su relación familiar, que no lo deja muy bien parado que digamos.  Y aunque eso suele suceder en casi todas las familias -la propia hermana de Trump lo acaba de poner de vuelta y media-…

 

En estos momentos en que acaban de torpedear su buque insignia contra corrupción; si que viene siendo significativo el agarrón familiar que le sirve de combustible de primera a sus opositores…

 

Los “Bejaranazos” están a la orden del día.  Y es de esperarse que continúen echándose lodo mutuamente; se intuye que tienen material de sobra.  Pero a fin de cuentas ya no nos asombra, ni deberá sorprendernos que después de todo nadie vaya a dar al bote…

 

No obstante, debe de servir para que nos demos cuenta de que todos son iguales; y que ir a votar, por el que sea, es continuar en lo mismo, padeciendo el “Síndrome de Layito”, en justo homenaje al presidente municipal de San Blas, al que reeligieron porque robó poquito…

 

Mientras no seamos una verdadera y auténtica República; no a la que tenemos corrompida por la democracia, nada va a cambiar.  Democracia sin un Estado de Derecho que pueda garantizar la División de Poderes de una República, desemboca en el desastre que estamos viviendo.  Ir a votar es seguirles el jueguito a los bandidos…

 

Las elecciones son para dar atole con el dedo a los ciudadanos, haciéndoles creer que se les toma en cuenta.  Bien decía el fundador de la Ciudad de Pensilvania, William Penn (1644 - 1718) “Dejad pensar al pueblo que gobierna y se dejará Gobernar”.

 

Por lo demás…

 

López Obrador no se la va a sacar diciendo que hará lo que decidan todos los gobernadores en torno al Pacto Fiscal; y si bien es cierto que su actitud parece democrática, no es justa…

 

Es tonto pensar que los que reciben más de lo que generan quieran salirse del Pacto; y son la mayoría.  Pero esto apenas empieza y el Presidente está jugando con fuego.  Sobre todo después de lo que se ha hecho público de su honestidad y sus pueriles disculpas.  Se habla de muchos millones de pesos…

 

Como tampoco se la va a sacar diciendo que enjuicien a su hermano Pío y de quien había dicho que era de los mejores cuadros de Morena y honesto a carta cabal

 

Tal vez lo próximo que se dé a conocer será la vida que se dan sus hijitos; que salieron igual de bandidos que los hijos de Martha Sahagún, quienes de la noche a la mañana hicieron fortunas…

 

Pero vamos bien.  Hasta ahora se va cumpliendo todo lo predicho.  Esta semana me dijeron que estaría movidita y parece que así está.  De sorpresa en sorpresa de escándalo en escándalo. Ahora también tenemos una orden de aprehensión en contra de Bertha Olga “N” esposa de Cesar Duarte.

 

Cambiando de tema… 

 

Como las cosas se les están saliendo de control a los artífices del desastre y la gente le está perdiendo el miedo al Coronabichus Apanicatum, comienzan a salir a las calles a hacer su vida normal…

 

Aunque los creadores del pánico siguen con la amenaza de que ya nada será igual.  Y ciertamente que ya nada deberá ser igual; pero ellos se refieren al control que establecerán sobre los ciudadanos…

 

Pero otros hacen referencia a un mundo de gente sana y por ende consciente de su papel en este mundo; que no puede ser el de destruir, el de dañar…

 

La gente cansada emocionalmente del confinamiento y desgastada económicamente, ha aceptado de buen modo lo que al principio se opinaba: que se morirían los que se tuvieran que morir; pero que la economía no se podía parar…

 

Que fue lo que hicieron en Suecia, donde murieron los que tenían que morirse, pero la gente siguió haciendo su vida normal y su economía no se colapsó…    

 

Y se llegó a esa aparentemente dolorosa conclusión, porque es lo que siempre ha sucedido en todas las epidemias.  Unos se mueren y otros no.  Se quiera aceptar o no, en La Naturaleza sobrevive el más fuerte.  Y en las epidemias se cumple esa Ley…

 

Sin embargo, estos tales por cuales autores del Coronabichus Apanicatum con el que enjaularon a la humanidad; como no han terminado su trabajo y con los cubrebocas y la sana distancia ya no hacen caso, pues se ponen caretas -las que tampoco sirven de nada- y se van a trabajar…

 

Pues ahora salen con que el Bicho vive en la carne congelada durante tres semanas y que se contagia hasta con el humo de los cigarrillos.  A ver mañana que se les ocurre…

 

Pero lo que es verdaderamente importante…

 

Es que se necesitan 1.6 millones de firmas para llevar a juicio a los ex presidentes; o que los diputados lo pidan.  Entre tanto, López Obrador sigue diciendo que él está en contra…

 

Y para descartar que su posición obedece al consabido “hoy por ti, mañana por mí”, insiste en que los diputados aprueben la Ley que permita llevar a juicio al Presidente.  Aplausos, diría Memo Ríos.

 

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.