Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

diariolibertad@gmail.com

·                  El buen juez…

La eterna interrogante de cómo es que ciudades enteras han sido abandonadas por sus habitantes y “devoradas” por La Madre Naturaleza, para que muchos años y Siglos después, sean “descubiertas” por intrépidos aventureros, la van a develar los habitantes de la otrora hermosa CDMX…

Quienes en unos días más carecerán del suministro de agua durante más de 72 horas; y por ello, cuando tengan que pagar pipas y garrafones para sus más esenciales necesidades, podrán valorar justamente que el agua es muy barata y que por eso inconscientemente la desperdiciamos…

Y ante la carencia, se pongan a meditar que hay personas que tienen que caminar horas para llevar un balde de agua a sus casas.  Aquí solo se abre la llave del grifo y hay quejas cuando falta…

Todo el mundo sabe que el agua es la vida.  Si no hay agua, no hay vida; pero no se está consciente de ello…

Igual que se sabe que fumar produce cáncer, pero quienes consumen tabaco no están conscientes; ya que si lo estuvieran, serían sabedores de sus consecuencias; y ciertamente que no lo están…

Se debe entender que, o se cuida el agua, que literalmente es la vida, o la otrora hermosa Ciudad de los Palacios y sus alrededores, serán, en un futuro no muy lejano, “devorados” por La Madre Naturaleza…

Una Ciudad sin agua, es una ciudad condenada a desaparecer sin dejar rastro.

Cambiando de tema…

Independientemente de que soy muy mal pensado, solo quienes todavía creen en los Reyes Magos, los milagros y los resucitados, pueden no darse cuenta de que la caravana de centroamericanos está organizada por “alguien” que está atrás de ellos y que persigue sus propios intereses…

Dejar la casa y la Patria no es fácil; y orillados por la falta de trabajo y de seguridad son muchos los que lo hacen; pero no con todo y la familia; normalmente se van solos, hombres y mujeres, a buscar trabajo y con suerte mandan por el resto de la familia, o envían dinero…

Solo quienes corren el riesgo de ser asesinados y que si dejan a su familia correrían la  misma suerte, huyen dejando todo; o nada…

¿Qué hicieron los miles de caminantes centroamericanos con las pocas pertenencias que pudieran haber tenido?  No se ve que vivieran en las calles como para no llevar absolutamente nada…

Y aunque el número les da seguridad, como en las migraciones, pocos se aventura a llevar pequeños a un viaje incierto si no llevan cuando menos comida y cobijo para ellos…

Los cubanos que huyeron masivamente tenían amigos o familiares en Miami.  En Siria hay lugares en los que no quedó nada.  No hay nada, ni agua, ni comida, ni trabajo, ni hospitales; todo lo destruyeron; pero ese no es el caso…

Lo desconcertante es que saben que no van a pasar a los EE.UU. por lo que se deduce que lo que quieren es quedarse en México, donde ya el Gobierno entrante dijo que les darán visas de trabajo.  Pero primero habrá que darles trabajo a los mexicanos; ya que el buen jueza, por su propia casa empieza.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.