Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

diariolibertad@gmail.com

·                                                 ¿Adiós a Pemex?…

Como sobre el bicho ya se ha dicho todo lo que se pueda decir, y más.  Sembrando con ello la desconfianza hacia la información y los datos que al respecto se tienen, toda vez que en las conclusiones a las que han llegado -todas ellas dictadas por expertos y solones con títulos y doctorados que hacen pensar que se han pasado toda su vida estudiando- se contradicen de manera abierta…

Y como al respecto en este espacio ya opiné todo lo que a mi juicio sucede con el animalito, que al igual que todos los demás parásitos -incluyéndonos a nosotros- se comporta de manera poco inteligente, pues su actividad destruye al huésped del que vive…

El día de hoy me referiré a otro aspecto que nada tiene que ver con el vilipendiado bicho al que llaman maligno y hasta satánico -sin soslayar el tema de lo apocalíptico que a tantos y tantos les fascina- comentaré sobre el petróleo…

Y para no muy variar, tengo una opinión que no es aceptada por todos; por no decir que por nadie.  Ya que la mayoría opina que la guerra del otrora llamado oro negro es entre Rusia y Arabia Saudita, los dos principales productores del mundo…

Soslayando la sabida amistad que tienen el Zar Putin y el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, argumentando, no sin cierta razón, que a esos niveles las amistades se hacen a un lado para dar paso a los fríos negocios.  Y si este es de miles de millones de dólares; pues más…

No obstante, si para descubrir un crimen hay primero que averiguar quién o quienes son los beneficiados; pues para descubrir un complot, hay que indagar quién o quienes salen perjudicados…

Y en este caso, el más perjudicado es EE.UU. ya que tanto Rusia como Arabia Saudita, si bien no salen librados de la debacle, si tienen modo de sortear la tremenda baja en los precios internacionales del barril.  Sin omitir que Rusia tiene más reservas que el país Árabe… 

Se da por sentado que los países importadores van a salir beneficiados; principalmente China, el más importante de todos; y que además comercia el energético con Rusia haciendo a un lado el dólar…

Pero el imprevisto golpe hizo que de un día para otro Washington se convirtiera de exportador, a importador; y en ese caso aparentemente saldría beneficiado por los bajos precios…

Pero no, porque al dejar reproducir bajo el sistema de la fractura hidráulica -el famoso fracking que tanto contamina el agua- todas las empresas que se dedican a la extracción del petróleo y el gas lutita, también llamado esquisto, no solamente en la Unión Americana, sino en otras partes, como en México, cancelarán su producción por incosteable.  Toda vez que por debajo de los 50 dólares -otros dicen que de los 60- les es incosteable continuar operando…

Dados los antecedentes del deterioro en las relaciones entre Washington y Riad que se han venido dando recientemente, es que supongo que todo fue un acuerdo entre Rusia y Arabia Saudita para darle a EE.UU. una cucharada de su propio chocolate…

Y de esa manera devolverle con creces las sanciones que arbitraria y unilateralmente impone a medio mundo; ya que en este caso, con todo y su poderío, no pudo meter las manos y su opinión no fue tomada en cuenta…

Por lo que el cierre de tantísimas empresas le afectará grandemente, sobre todo en su dependencia del exterior; y desde luego en su ficticia economía de por sí en la cuerda floja por la evidente falta de apoyo real a su moneda que, en la actualidad solo es respaldada por las armas…

Desde luego en todo este movimiento México saldrá tremendamente perjudicado; pues a pesar del respaldo que tiene al previamente haber contratado seguros de garantía; al bajar el precio del crudo a menos de 19 dólares, la saqueada Paraestatal no podrá seguir produciendo y tanto la planeada refinería de Dos Bocas, como la propia Empresa se verán comprometidas grandemente por lo que convendrá más importar que producir…

Y si la “fuerza moral” que el lambiscón de López-Gatell le adjudicó al Presidente para rechazar la contaminación del bicho sirvió para dos nadas -aunque ciertamente que aún no ha cobrado una sola vida- el derrumbe en los precios del petróleo en nada ayudará al proyecto de la T de 4ª.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.