Opiniones y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
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Se les cayó el teatrito; pero
insisten…
La pregunta de fondo para evaluar si AMLO y su
T de 4ª van saliendo bien librados de la pandemia, o no. Aunque ciertamente que aún no ha finalizado el
evento y de aquí a que termine pueden variar mucho las apreciaciones…
Pero hasta aquí, México lleva un destacado
papel en el vodevil que han armado con el cuento del Virus que cambió al mundo.
Que cambió de Era. El Virus que dejará atrás la Era cri$tiana…
El 2020 será el comienzo de la Era del Virus
que bajó del cielo para salvar a la humanidad del neoliberalismo; con la enorme
ventaja de que éste ya les llegó coronado; y en el “enjuague” no hubo necesidad
de cuentos chinos para justificar su aparición en este mundo…
Decía López
Gatell, de quien opinan que le fue muy bien con los senadores, pues dicen
que los apantalló a todos durantes más de cinco horas -lógico, les habló de lo
que no conocen y en términos del argot médico-…
Pero lo cierto es el zar del coronavirus primero
dijo que serían como 6,000 los que fallecerían durante la pandemia a causa del
Bicho; después la cifra la elevó a 30,000; pero como de última hora ya van 9.044
los muertos, las “proyecciones” quedaron atrás.
Ojo, ya no dan diagnósticos, sino proyecciones…
El caso es que según caculos matemáticos de un
ilustre y connotado desconocido, de esos que últimamente han tenido sus cinco
minutos de fama, las matemáticas es lo que cuenta…
Y se atrevió a dar proyecciones tan exactas y a
tan corto plazo, que lucen en extremo comprometedores para calificarlos como
científicos matemáticos, o como charlatanes de feria…
Pero aseguran que el 5 de junio se aplanará la
curva; que el 26 de julio morirán 2,181 personas; y para el 4 de agosto serán
88,000 los fallecidos. De cumplirse las
“proyecciones” seguramente tendremos medalla de bronce internacional en la
contienda por ver quien cuenta con más muertos…
El primerísimo lugar, al parecer se lo llevará
EE.UU. seguido muy de cerca por Brasil y en tercer lugar estará México…
De ahí la prisa por recibir el indulto para
poder salir de la prisión domiciliaria que arbitrariamente y en contra del
derecho a la Libertad nos impusieron a cuenta de un Bicho tan terrible al que
se le derrota ¡con Aspirinas!...
Porque han de saber amables lectores, que como
no han podido controlar la epidemia, ni curarla, la milagrosa Aspirina les puede echar abajo los
nuevos negocios que están apareciendo por la pandemia y eso va en contra de sus
intereses, por de eso casi no se dice nada…
Sin embargo, lo cierto es que desde hace ya
muchos años la Aspirina ha sido
recetada por los cardiólogos para prevenir los infartos…
Pero insisten en que no hay medicina para el tratamiento
y mucho menos vacuna; en lo que trabajan arduamente y por lo que ya recibieron
por anticipados miles de millones de dólares…
Ahora bien, en el entendido de que lo más
probable es que al Bicho no lo haya soltado nadie; que es un fenómeno natural,
como las plagas de langostas que acaban de aparecer por África, en Etiopía, en
Somalia y en Kenia, y que ahora azotan a la India acabando con las cosechas…
Ya no hay responsables de ataques biológicos; y
en vez de hacer un solo equipo de investigación, ahora se acusan por manejar
mal la pandemia. El caso es que las
pérdidas hay que achacárselas a alguien…
Pero la campaña mediática de terror que le ha
dado la vuelta al mundo sí fue orquestada por alguien con más que aviesas
intenciones; aún desconocidas. Cabe
reconocer que la campaña fue magistralmente orquestada y llevada a cabo…
El impacto que ha tenido para que en todo el
mundo se hable de lo mismo y se especule sobre sus verdaderas intenciones, aún
desconocidas, es, desde el punto de vista del manejo de masas, admirable…
Lo desconcertante es que, por los elevados
costos de la campaña, ésta deben de haberla orquestado los ricos; y
curiosamente han sido los más perjudicados al cerrar el comercio y la industria
en medio mundo con pérdidas incalculables…
Tal vez algún día se llegue a conocer la verdad
sobre esta locura colectiva que, si Josué paró al Sol y a la Luna con un dedo;
quien haya sido paró al mundo con un virus.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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