Diario Libertad

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Don Sata

miércoles, 2 de abril de 2014

Opiniones y Comentarios

·         Política equivocada ¿deliberadamente?...

La pren$a, se ha encargado, o mejor dicho, a la pren$a le han encargado denostar a los narcotraficantes como si fueran lo más malo de lo malo; haciéndolos aparecer como secuestradores, vendedores de protección -contra ellos mimos- y de piso, como secuestradores y extorsionadores de gente trabajadora…

Y así fielmente lo han hecho siguiendo las instrucciones de los EEUU, para quienes las drogas representan un gran negocio.  Baste recordar que en los propios aviones de su Fuerza Aérea han traído el opio, primero de Vietnam y posteriormente de Afganistán…

Y aquí en México se empezó a sembrar la amapola a raíz de la segunda guerra mundial, pues los yanquis no la podían conseguir fácilmente y le encargaron al gobierno de nuestro México -lo de “nuestro” ya saben los amables lectores que es un eufemismo- que los apoyara, por lo que en los Estados del Norte se comenzó a cultivar…

Y si ahora ya comienzan a oficializar el negocio al permitir que la marihuana se venda legalmente -no así la cocaína y las demás drogas de “diseño”- lo que les ha permitido meter millones de dólares a su quebrado Erario, antes lo hacían -y lo siguen haciendo- para beneficios privados…

No se debe olvidar que en lugar de destruir las drogas que incautaban, las cambiaban por armas.  El “operativo Irán-Contras” es solo un ejemplo de ello.  Y dados los antecedentes, no se podría juzgar de mal pensado a quien supusiera que el “Rápido y furioso” con el que, con la autorización de Obama y a través de el procurador general Erick Holder, introdujeron armas de contrabando a México para entregárselas al crimen organizado, también las hayan cambiado por drogas…

En las grandes ciudades de los EEUU hay en ¡cada cuadra! cuando menos una “tiendita” donde venden “crac” Y no exagero; esto es sabido por todos.  Y cuando la policía llega a detener a alguien es porque no ha participado de sus utilidades a los agentes del orden (¿?)…

Por lo que en lugar de perseguir a los narcotraficantes, las autoridades mexicanas deberían de perseguir a los secuestradores, a los violadores, a los traficantes de órganos y de personas; y si mucho me apuran, hasta matarlos…

Pues este tipo de delincuentes hacen mucho más daño a la sociedad que los narcotraficantes; y ya no se diga a la salud; pues los que mueren por las drogas, incluyendo a los que son asesinados, no son ni la décima parte de los que mueren por causa del tabaco, del alcohol o de la comida chatarra, por separado; y ya no se diga todas juntas…

Los narcotraficantes no obligan a nadie a comprarlas, en cambio la comida chatarra, al igual que el alcohol, los publicitan hasta en las camisetas de los deportistas; lo que es insólito, pues ellos no deben de consumir ese tipo de porquerías…

Y por perseguir a los que siembran y trasiegan las drogas, han dejado de lado a los que verdaderamente hacen daño a la salud, a la sociedad y finalmente a la Patria; pues el enorme número de obesos y de diabéticos que hay, que son las tres cuartas partes de la población, finalmente acabarán no sirviendo para nada…

Y nada ha mejorado la inseguridad con el asesinato o la captura de los narcos; antes al contrario, los lugares donde se llevan a cabo operativos se ha incrementado exponencialmente la violencia…

Por cierto, que si en un principio, a pesar de los hechos y las denuncias el flamante gobernador del Estado de México, un tal Eruviel Ávila, al igual que todo el gabinete de seguridad, minimizaban los crímenes que a diario se cometen en la citada Entidad…

Por fin han acabado de reconocer que la cosa está que arde, y por eso el Ilegal, por supuesto rodeado de un impresionante aparato de seguridad de más de 150 personas -y lo mismo y me quedo corto- dio el banderazo de arranque a un operativo que finalmente no va a servir para nada, pues no disminuirá la delincuencia…

Como no ha disminuido en Ciudad Juárez, o en Michoacán, donde siguen matando gente en las narices de quienes se supone que fueron enviados y están para evitarlos, a un costo social y económico, altísimo…

Social porque los habitantes ahora no solo tienen que cuidarse de los delincuentes organizados, sino también de los delincuentes desorganizados; quienes, por lo visto, más están a favor de los pillos, que de los que se han propuesto auto-defenderse…

Y económico, porque por dedicar dinero a la seguridad, la que no ha fructificado, han reducido los presupuestos en educación y salud; y de generar empleos, que en última instancia es en lo que debería de invertirse para acabar con la delincuencia; pues muchos que entran a formar parte de ella es porque no tienen oportunidad ni de prepararse, ni de trabajo…

Y por supuesto, que si legalizaran las drogas, aparte de que el Erario recibiría cantidades de dinero que ahora no llegan, podría el gobierno dedicarse a perseguir y eliminar a los delincuentes del orden común, a los que nadie extrañaría si los ultimaran…

Como sí que extrañan a los verdaderos capos que hasta manifestaciones de duelo hacen cuando los liquidan, o marchas para que los liberen cuando los capturan…

No está por demás recordar cuántas han sido las mantas que los narcotraficantes han puesto en las vías públicas, diciendo que los dejen trabajar y que ellos se encargarían de acabar con los secuestradores, los violadores y los extorsionadores…

Pero que se puede pedir si a fin de cuentas estamos gobernados por sátrapas que llegaron al Poder fraudulentamente y por auténticos delincuentes, solo que con cuello blanco…

Por cierto, “qué poco padre”, por no decir que “qué poca madre”, la de Melissa Plancarte “La Barbie grupera”, quien habiéndose entrado del asesinato de su padre, a través de las redes dijo “nadie es eterno en el mundo”, cuando en última instancia su “éxito” se lo debe de una u otra forma al dinero de su padre.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.


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